Buenas tardes a todos/as aquellos/as que disfrutamos de esta modalidad de caza que tantas alegrias, tristezas, nervios, esperanzas, ... nos provocan temporada tras temporada.
Me atrevo a escribir algunas palabras que me gustaría compartir con vosotros por si algunas os pueden ayudar a disfrutar un poco más si cabe de esta forma de vida, que no es otro, que la de un auténtico pajaritero.
Me llamo Luis Pedro y tengo el placer de conocer a Manuel Romero, al cual pido disculpas desde aquí por no haberme puesto al habla con él para comunicarle la muerte de mi padre pero no he podido por mil razones y sentimientos.
No considero este tipo de caza una modalidad ni una disciplina sino un sentir, una forma de vida, de ver la caza y amar la Perdiz Roja.
Era un sábado del mes de Diciembre de hace muchos muchos años cuando estabamos la familia buscando Setas en la sierra de Córdoba cuando mi padre y yo oímos a lo lejos un pájaro dando de Pié, en ese momento los dos notamos que era algo raro y nos miramos fíjamente sin dudar que aquel canto que se escuchaba de fondo era un Pájaro de Jaula. Sin más, decidimos ir a buscar aquel pájaro para conocer a su dueño y así poder conocer a alguien que nos informara sobre lugares de la sierra cordobesa donde poder cazar con nuestros pájaros. Y fué ahí cuando conocimos los dos Luises a los dos Manueles (uno de ellos Mauel Romero). Muchos cazadores en ese momento se hubieran molestado porque estaban probando un pájaro, sin embargo, recuerdo que fué todo lo contrario, nos pusimos a contar anecdotas de esta modalidad durante cerca de 1 hora.
Puedo decir, sin miedo a equivocarme, que realmente he disfrutado de mi Padre gracias a esta pasión que compartiamos, que lo he conocido como nadie y que no me arrepiento para nada de haber estado compartiendo puesto con él el 99% de las veces que he salido al campo.
Acabo de leer un artículo de un compañero que habla de los nervios que uno siente a salir por primera vez solo al campo con su puesto, pájaro, escopeta,.... Yo también los tuve en su día pero este año es tan grande dicho miedo que no voy a salir porque no está mi padre con nosotros. Muchos pensareis que vaya tontería, nosotros (los Pajariteros) siempre hemos destacado por no ser carnívoros sino por disfrutar del campo con nuestros pájaros y yo he disfrutado gracias a la compañía de mi padre. Nunca podré olvidar tantas y tantas anécdotas buenas y menos buenas que he pasado en el puesto, pero casi siempre con él, y si no fué con él, el teléfono hacía constantemente de mediador.
Los últimos años me compré una cámara para grabar los puestos que haciamos y la verdad es que ha sido mi mejor inversión ya que no sólo puedes revivir el trabajo de un buen pájaro sino la felicidad en nuestros rostros de estar compartiendo una misma pasión.
No soy nadie y perdonarme el atrevimiento, pero a mis 35 años y 25 cazando el Reclamo voy a permitirme dar un consejo que quizas algunos quieran seguir, otros no y simplemente otros no puedan porque no tengan con quien hacerlo, pero no hay ni habrá cosa más emocionante, divertida y pasional que meterte en un mismo puesto, por muy estrecho, apretado, incómodo, etc. que sea con alguien que sienta lo mismo que tú por la PERDIZ ROJA, y si ese alguien es tu padre, madre, hijo, hija, hermano, hermana,... mejor que mejor ya que son recuerdos que te van a quedar para toda tu vida.
Sin más, deciros que disfruteis esta temporada de todos vuestros pájaros que con tanta ilusión llevamos mimando y cuidando todo el año y lo que es más importante aún, disfruteis de la Vida y de todo aquello que os rodea y que tanto merece la pena cuidar.
Un Saludo de vuestro amigo Luis Pedro.